Nutricionistas y profesionales de la salud informan acerca de un incremento del 85% del consumo de alcohol durante esta cuarentena, lo que es un dato bastante elevado. Ya solo la venta de cerveza en supermercados aumentó un 78% durante las dos primeras semanas de la cuarentena.
Estas cifras pueden entenderse dentro del contexto del confinamiento vivido: hemos pasado a hacer todas las comidas en casa, no en la oficina; la cerveza del aperitivo de los sábados hemos podido extenderla a todos los días de la semana; parece que en una medida mayor que antes de la pandemia, el alcohol nos ha acompañado durante esta época de pandemia, en especial el consumo de cerveza, vino y espirituosos.
Si a medida que regresamos a la normalidad, nuestras costumbres referidas a la bebida también lo hacen, entonces poco habrá que objetar. El problema radicaría en si estos nuevos hábitos han quedado instalados. Sobre todo porque beber en casa tiene más riesgo para la salud, el aumento del consumo de alcohol no social aumenta el riesgo de adicción. Habrá quien pueda necesitar de una desescalada en el consumo doméstico de alcohol.
Si te preocupa el tema, por ti o alguien cercano, te dejo enlace a un par de cuestionarios que podrán orientarte.